Desde el jueves 29 de julio de 2010, con un acto simbólico en Villa Gesell, Fecosur lanza formalmente en todo el territorio nacional, la operatoria de la marca NUESTRO, con la cual el sector cooperativo comienza su incursión en la telefonía celular.
Se debe reconocer la constancia y decisión de Antonio Roncoroni, presidente de dicha federación y de la cooperativa anfitriona para el lanzamiento, quien viene bregando por lo menos desde 2001, cuando en la misma ciudad donde hoy se inicia el servicio, durante un evento cooperativo, lanzó la idea que “el Movimiento debía tener su propia empresa de telefonía celular”. Después, como todos saben, siguieron otros proyectos, idas y vueltas, el intento de construir una única empresa de telecomunicaciones cooperativa que uniera a las viejas prestadoras con las nuevas que comenzaron a aparecer y garantizara tanto la telefonía básica como las móviles, los transportes de datos, la provisión de ancho de banda a precios razonables en todo el país y otros servicios de valor agregado y muchos de esos intentos quedaron en el camino, algo que a veces el cooperativismo exhibe con demasiada frecuencia. Sin embargo, finalmente, después de mucho batallar y de encontrar caminos alternativos, como son la de constituir una empresa que sea “Operador Móvil Virtual” (MVNO por su sigla en inglés), utilizando para el despliegue territorial la infraestructura de la empresa Personal, el jueves se presenta NUESTRO, que desde el mismo nombre preanuncia un cambio de paradigma en la telefonía celular.
Vendrán ahora las verdaderas pruebas de fuego, ya que este sistema de Operador virtual, ha tenido diversos resultados en los pocos lugares del mundo donde se implementa, sin embargo, el cooperativismo argentino, tiene larga trayectoria en esto de reinventarse y buscar salidas no convencionales. Según Roncoroni, el acuerdo con Telecom Personal contempla el pago de precios a valor mayorista (más baratos que para el usuario final) por el consumo que realicen los clientes y descartó un esquema de distribución de ingresos. Señaló que la oferta de modelos de teléfonos celulares será similar al de Claro, Movistar y Personal. “Hemos firmado acuerdos con casi todas las fabricantes”, afirmó. Y anticipó que los clientes “tendrán la recarga garantizada en todo el país”, pese a que apelarán más al sistema de recarga electrónica que a las tarjetas prepagas. Finalmente, también estimó que “desde este momento y hasta fin de año llegaremos a 180 ciudades y en nuestro plan de negocios proyectamos 200.000 abonados en 24 meses y 1,3 millón en cinco años”. Al respecto, la base inicial de entidades de base que adhieren al proyecto, es bastante mayor que la propia membresía de Fecosur, por diversos acuerdos que se fueron concretando en los últimos meses y que MIRADA COOPERATIVA en varias oportunidades fue informando.
De acuerdo con datos del Indec, a mayo pasado había en el país 54,6 millones de líneas en servicio. Para los consultores privados, el número es inferior, porque tienen otro criterio para depurar el padrón de cuentas inactivas. En diciembre, por ejemplo, cuando para el Indec había 50,4 millones, para el consultor especializado Enrique Carrier, titular de Carrier y Asociados, había 48,7 millones de líneas, de las cuales 17,14 millones correspondían a clientes de Claro; 15,93, de Movistar; 14,47 de Telecom Personal y 1,15 millón, de Nextel.
Si bien es cierto que NUESTRO ingresa al mercado en un momento de total madurez del sector de telefonía celular, con tres empresas gigantes (Movistar, Claro y Personal) y otra “de nicho corporativo” Nextel, que a su vez son sucursales de grandes operadoras internacionales, lo cierto es que tampoco existe otro país de la región que disponga de un cooperativismo de servicios públicos tan difundido y consolidado como Argentina. Por tanto, los proyectos sobre el desarrollo y el cumplimiento de los planes de negocio fijados, aún son una incógnita. Nosotros creemos que la empresa tiene chances de lograr una ubicación que ayude al sector cooperativo a recuperar parte de la porción de mercado del seis por ciento que llegó a tener en un momento dentro de las telecomunicaciones y que con el nuevo siglo fue perdiendo aceleradamente, por la aparición y expansión de los celulares fuera de su alcance y por problemas de planificación estratégica propia también.
NUESTRO así es una buena noticia para el cooperativismo mundial, que verá aparecer una nueva alternativa, inexistente en todos los países y también es una buena noticia para los usuarios argentinos, que una vez más tendrán servicios de base cooperativa compitiendo con los que míticamente se atribuyen en exclusividad a las grandes empresas concentradas como única vía de sustentabilidad.
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