Polino recomendó a los usuarios de garrafas que guarden la factura para futuros reclamos

POLINO RECOMENDO A LOS USUARIOS DEL GAS EN GARRAFAS QUE CONSERVEN LA FACTURA PARA PODER RECLAMAR LOS SOBREPRECIOS. EL GOBIERNO DESTINA 200 MILLONES DE PESOS EN SUBSIDIOS.

El representante legal de Consumidores Libres, diputado socialista (MC) Héctor Polino recomendó a los usuarios de gas licuado de petróleo (gas en garrafas) ante los aumentos desmedidos en los precios, que conserven las facturas de compra para luego tener derecho a reclamar el reintegro de lo que le están cobrando ilegalmente.

Polino señaló que "el gobierno nacional destina 200 millones de pesos para subsidiar la venta del gas en garrafas de 10 kilos a 16 pesos, de 12 kilos a 20 pesos y de 15 kilos a 25 pesos".

"Existe en este momento un verdadero abuso por parte de las empresas fraccionadoras, transportistas y distribuidoras del gas envasado, agrego Polino, que están lucrando ilegalmente con las necesidades de los sectores más humildes de la sociedad. Y lo que es peor aún, el gobierno nacional continúa subsidiando a esas empresas para que vendan el GLP a los precios señalados, dentro del marco del plan "Garrafa para todos" y que esta rubricado en el "acuerdo de estabilidad del precio del gas envasado".

Finalmente, Polino recomendó a los usuarios a hacer la denuncia al 0800-333-4444 que es una linea gratuita del ENARGAS (Ente Nacional Regulador del Gas)y también pueden comunicarse con Consumidores Libres: consumidores_libres@yahoo.com.ar.




PRENSA
17 de Julio de 2010


Observación de MIRADA COOPERATIVA:
                                                        Con el enorme afecto y apoyo a la constante lucha del Dr. Héctor Polino a favor de los derechos de los consumidores, creemos que el tema de las garrafas es una muestra más de las enormes fallas estructurales que el actual modelo de subsidios estatales a las empresas está generando y seguirá generando.
                                                        Los pobres y los que viven en zonas marginales del país , generalmente del interior, son los usuarios del gas en garrafa.
                                                        Mientras los subsidios que reciben los sectores de mejores ingresos de la población, o que viven en las áreas más pobladas, a través del gas en redes, les permiten que cuando hay gas puedan usarlo, los más humildes tienen que mendigar y recorrer enormes distancias para conseguir las llamadas "garrafas sociales", las cuales generalmente sólo se entregan en las plantas fraccionadoras, a veces a varios kilómetros de las pobres casas que deben ser calefaccionadas. Esta situación demuestra que el modelo falló en este punto y mucho...
                                                         En las localidades que son atendidas por plantas cooperativas, se cumple a rajatabla el precio más bajo y a lo largo de la historia esas entidades sufrieron constantes agresiones y persecusiones de los organismos reguladores. Eso también debe ser analizado.
                                                        En un sistema donde la garrafa se obtiene cuasi en la informalidad, es difícil que el pobre comerciante que también la recibe con sobreprecio, otorgue la factura. No obstante, creemos que hay que procurar por lo menos esa medida.
                                                        Lo correcto sería en un mundo informatizado, en un país donde existe incluso un Ministerio de Desarrollo Social, que se entregara a los hogares más pobres, una tarjeta identificable, donde se otorgara de manera directa el mencionado subsidio, que debería ser descontado por el comerciante al distribuidor y desde éste al envasador y así hasta llegar al proveedor último que lo podría descontar del IVA frente al gobierno.
                                                       Mientras tanto, no solo pobres, sino también estafados.                                      


Rodolfo Santecchia