Héctor Polino. Una presencia de lujo en Mirada Cooperativa

Cuando lanzamos esta página web hace poco más de un mes, nos propusimos generar un canal donde el Cooperativismo pudiera encontrar un lugar donde se difundieran opiniones, documentos, puntos de vista diferentes y fundamentalmente significara un ámbito de debate libre.
El sector cooperativo ya tiene en su seno, un conjunto importante de medios de comunicación, muchos de ellos son “house organs” o dicho en castellano “órganos oficiales” de diferentes federaciones y entidades de base. No está mal que ellos existan, al contrario, siempre los apoyamos; pero a veces es difícil que en los mismos se puedan expresar la divergencia, las alternativas, las dudas. Precisamente porque explicitan los puntos de vista de quienes gestionan organizaciones y eso, como se sabe está muy condicionado por esa misma acción.
También hay varios y muy buenos medios de prensa independientes, hay revistas, páginas web, foros. En muchos casos, estos sufren el abandono publicitario de las organizaciones cooperativas, que deberían sostenerlos financieramente, para que su existencia fuera sustentable y duradera.
Esta página aspira a ser un medio de comunicación independiente, que sea doctrinariamente cooperativo en un cien por ciento; pero sin ninguna atadura a organización alguna que pudiera condicionar ni mínimamente su “libertad salvaje” para transportar información, opinión y análisis.
Arrancar con ella no fue sencillo, pese a mi experiencia de varios años creando, planificando, organizando y dirigiendo medios de prensa variados (revistas, páginas web, canal de televisión satelital…). Allí nos encontramos otra vez con esa gran dificultad que tiene lanzar un medio, a lo cual debí sumarle que lo hacía solo, sin apoyos externos y con grandes incapacidades técnicas de mi parte. Antes me tocó manejar equipos de personas profesionales cada una en su actividad. Había periodistas, programadores, técnicos en comunicaciones, diseñadores. Hacer el planeamiento estratégico y conducirlos no implicaba resolver temas del código html, o insertar un banner, o una foto…que fue todo un aprendizaje. Eso lo hacían los expertos. Por eso pido disculpas a quienes siguieron a Mirada Cooperativa desde el principio…cada día se aprende algo nuevo y todavía me falta mucho.
También estuvo el tema de la selección de notas y del tiempo que mis actividades profesionales dejaban disponibles para la página web.
Y sin embargo, a pesar de la planificación a mediano plazo que siempre hago en todo lo que encaro, en el primer mes se superaron con creces los resultados que imaginaba para los primeros seis meses.
Tres datos son significativos. Las páginas vistas, es decir la lectura del contenido, superaron el número mil al poco tiempo, y eso para un sitio con un solo actualizador que “repica y da misa” es mucho. Por otra parte, se generó una interesante corriente de usuarios recurrentes, es decir lectores que vuelven una y otra vez. Eso es el segundo gran obstáculo a superar por un sitio nuevo. En tercer lugar, el tiempo que los usuarios están en el sitio, es altísimo en comparación con otras páginas web cooperativas, eso demuestra que hay una lectura distendida y meticulosa.
Con ese bagaje a cuestas, casi sin quererlo, comenzaron a acelerarse los tiempos de la segunda etapa planeada: abrir el sitio a todas las opiniones posibles. Fue mi amigo (y probablemente amigo de todos los cooperadores) el Dr. Héctor Polino quien con la sencillez que le caracteriza mandó un escueto correo electrónico de dos renglones donde sugería una charla. Bastaron quince minutos de una conversación telefónica en la cual, como siempre me ha ocurrido con Polino, acordamos casi la totalidad de los temas y a las pocas horas comenzaron a llegar las notas que con su firma y sin tocarle ni una coma, se irán incluyendo periódicamente en Mirada Cooperativa.
Se que con el tiempo llegarán otros pensadores cooperativos a engalanar esta página, hoy, le damos la bienvenida a nuestro jerarquizado columnista e invitamos a quienes deseen sumarse “sin limitaciones ni censuras” como se establece en la misión que encabeza este espacio. Gracias a todos

Rodolfo Santecchia